sábado, 9 de enero de 2010

Lo Peor del 2009: Cinco certificados de defunción.

El 2009 nos ha traido tal cantidad de chatarra vergonzosa, que resulta verdaderamente difícil rebuscar en el fondo de esta particular bolsa de basura y desperdicio sonoro y elegir 5 elementos ultrajantes al arte musical. Quedan a salvo de la guillotina los condenados obvios tipo la última sensación adolescente, o florecillas gorgoritantes como Bisbal, más que nada por falta de cabeza y por tanto cuello donde descargar a la inapelable Madame. Sin embargo, la hoja actuará sin piedad sobre 5 bandas o solistas con talento suficiente para producir obras de al menos cierto nivel que se empeñan en venderse o malgastarse, o algún hype de turno.

01 Green Day - 21st Century Breakdown.
Por si el mundo no hubiera tenido suficiente con su anterior bodrío mediático "American Idiot" (y sus cúspides "Boulevard of Broken Dreams" un apestoso título para una apestosa canción a base de tópicos sobre la soledad, plagada de irritantes arreglos mainstream, y la letal "Wake Me Up When September Ends", hilarante baladita adolescente más algodonosa que toda la industria azucarera mundial), los tios van y se descuelgan con otra ópera rock, reciclando descaradamente las estructuras patentadas por Townsend hace ya 4 décadas ( en "Before the lobotomy" por ejemplo), con por supuesto, muchísimo menos talento, gracia, rock, y arte que el modelo original.
Anunciado ni más ni menos como "un disco duro de ideales punk", la morralla que sueltan los Green Day a lo largo de los tres "actos" es sin embargo tan inofensiva como la abuela Genobeva hasta el culo de Valium 100, un rock barato surtído de préstamos y clichés que revienta continuamente las melodias de los Cheap Trick, incluso CALCA en un tema los acordes de "Hindu times" de Oasis.
Qué lejos estan los tiempos de "Dookie" y su arrebatador vigor juvenil.
.
02 Julian Casablancas - Phrazes For The Young.
Verdaderamente insoportable la monodia del amigo Casablancas, el mismo soniquete sobrevolando por cada canción del disco, un compendio de lo peor de la radio ochentera que tantos momentos de pesadilla propagó por las ondas. Escuchando este disco queda claro que The Strokes (de los que se puede decir de todo pero al menos han provocado que cientos de jovencitos se hayan encerrado en un garage para montar una banda) son un grupo menos malo cuando la influencia negativa de este egomaníaco queda dispersada por las otras corrientes internas. Ahora sabemos de donde sale el irritante toque Giorgio Moroder de los Strokes.
También le ha dado por cultivar una imagen entre homo siglo XXI y bohemio, que así de entrada pega muy poco con el pastiche pseudocultural que ha endosado al respetable. En fin, música para fashion victims y la gente de siempre que quiere pasar por estar a la última, aunque lo último sea poner su pene a remojo en ácido vitriólico.
.
03 Bruce Springsteen - Working On A Dream.
Leí en la edición americana de "Rolling Stone" que este disco era comparable a "Born to run" en ambición y grandeza, pero aquí falla algo Watson. De un tipo que se permite el lujo de no publicar canciones de la talla de "My love will not let you down" (de hecho superior al 95% de su discografía editada) hasta casi un par de décadas después de su grabación hay que esperar el máximo, y no el gato por liebre. En lugar de "Thunder road" el rockero oficial de Catalunya se descuelga por la pendiente y sin frenos en momentos como "Life itself" o "Kingdom of days", dignos de haber figurado en el cagarro infumable "Tunnel of love". Aquí había material, no obstante, para haber publicado un disco de resurrección, pero todo está a medias, unos arreglos bastante mejorables, la energia de la E Street contenida en demasía, momentos de autocomplacencia que impiden que el rock ruja con fuerza... hasta la casi constante evocación a Roy Orbison queda deslucida. Esas letras... podrían redondearse también..cojones!
Nunca pude con el Bruce posterior al 85, hasta que los conciertos del Madison Square Garden del 2001 me noquearon, total hair raising... a ver que mortal no sucumbió a la tripleta de inicio "My love will not let you down" - "Prove it all night" - "Two hearts", encadenadas una tras la otra, que fuerza y que grandeza!. Desde entonces estoy esperando "ese" disco que algún dia tendrá que llegar, no? El tio puede hacerlo!
.
04 Iggy Pop - Preliminaires
El gran Iggy se presentó en el 2009 con un experimento de inspiración francesa, todo ese rollo de París en la niebla, Montand, feuilles mortes, decadence, soft jazz etc. El disco no es para tirarlo a la basura, pero esta colección de música ambient dificilmente puede escapar al adjetivo de anecdótica. La segunda y tercera escuchas son más duras, porque el tedio hace su aparición y va minando la paciencia poco a poco.
Un disco fallido, lamentablemente. Obvimante no hay nada que reprochar cuando un personaje como Iggy Pop decide experimentar, abandonar los decibelios y juntarse con tipos completamente ajenos al mundo de la Iguana de Detroit. La grabación está en un punto extraño, cerca de haber transitado por vias interesantes, pero lo único cierto es que "Preliminaires" no tiene digamos "espiritu" y el disco se mueve en general por una especie de limbo. Al menos si que hay un tema que huele a grande: "I want to go to the beach" (de inmediato acuden a la cabeza Lou Reed, Berlín y Bowie). Los momentos más "iggy", por otra parte, abundan en la sensación de cliché, y las versiones en francés son lo peor con diferencia. Vamos, señor Ostenberg, usted puede hacerlo mucho mejor.
.
Muse - The Resitance.
Para mi siempre será un misterio el hecho de que esta banda haya alcanzado relativas cotas de respeto y popularidad, incluso Jools Holland los invita a su programa. Otra cosa que permanece fuera de mi comprensión es que al tipo que canta y toca, Mathew Bellamy, le publiquen entrevistas en revistas especializadas para guitarristas en base a los gadgets que le mete a sus guitarras. Y digo que no lo entiendo porque cualquier mocoso toca con más garra y estilo y de verdad que no hace falta tanta mierda para acabar tocando lo que acabamos oyendo en nuestras casas.
Desde el principio, Muse me ha parecido un grupo bastante limitado de ideas y de personalidad, un recachutado barato de lo peor de Manic Street Preachers y Radiohead, con el añadido de la poca naturalidad de la que hacen gala, y su desmedido gusto por la pose y el gesto apocalíptico (esas caras de estreñimiento!). La sensación se confirma al 100% con su disco de 2009, "The Resistance", de un aburrimiento mesiánico absolutamente letal.
No se que más decir de estos notas, solo desearles que les vaya bien. Y que traten de poner algo más de contenido en las letras, por ejemplo. Ah, y otra cosa, Sr. Bellamy... los sneakers de tacón alto solo le quedan bien a los Faces, mamón, y a estos zapatos se les canta así!